Arturo mordió a Marisol

El lunes por la noche vivimos el ingreso de las personas más queridas por los participantes. Estarán durante una semana jugando pero con un claro objetivo: el premio (viaje) y el liderazgo. No es una cosa menor porque quedan muy pocos y si consiguen ser líder se aseguran casi estar en la final.

Uno de los encuentros más esperados fue el de Furia y Coy, como así también el del Chino y Marisol, su novia. Recordemos que se hizo la nariz nueva, por lo que no sabíamos cómo iba a reaccionar él. No se dio ni cuenta. El amor es así (?). Una hora después de haber entrado, ella le pregunta si veía algo distinto y pregunta si era el pelo. Hombres, amigos.

Marisol fue la última en entrar. Lo hizo casi sobre el final del programa. Es más, Santiago del Moro los apuró cuando se estaban abrazando y besando. Una hora y media de programa para hacerla entrar un minuto antes, sabiendo que no se ven hace más de 6 meses. Media pila.

La novia de Martín comenzó muy bien en las redes sociales haciéndole bromas al Chino, quien no paraba de mandarse pifiadas en cuanto a su estrategia. Luego, con el correr de las semanas, fue corrigiéndolas y hoy es uno de los favoritos para ganar Gran Hermano.

Todos conocemos a Arturo, el perro de la casa. Es un galgo de unos pocos meses que fue abandonado y de pronto apareció en Gran Hermano. Deben sacarlo seguido para cansarlo porque al ser muy pequeño tiene muchísimas energías. Martín es su «papá». El día que se vaya se lo llevará.

Una vez instalada en la casa, Arturo no quiere saber nada con ella: la mordió en varias oportunidades. La primera vez le agarró la ropa y ella gritó «pará que es ropa cara». ¿Qué le pasa? El Chino no debe entender nada. Se hace la clase alta. Insólito. Cuando salga y se entere del video donde trata de «pobre» a los seguidores.

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